Quizás cuando pienses en México, te venga a la cabeza la Riviera Maya o la Península de Yucatán. Yo te voy a proponer para tu viaje a México otra península no menos importante y es la Península de la Baja California.
Esta Península situada en el Oeste mexicano se extiende desde Cabo San Lucas hasta Tijuana y está compuesta por los Estados de Baja California y Baja California Sur. Recorrer los 1250 kms que dista este enorme brazo de la República mexicana es uno de las mejores experiencias que te puedes llevar de tu paso por este país norteamericano.
Te propongo alquilarte un coche en Cabo San Lucas Tijuana y dejarlo en Tijuana o viceversa, aunque si prefieres hacerlo en transporte público es también factible.

En la costa de Mulegé
La Península de la Baja California no te dejará nada inadvertido. Solitarias carreteras ondulantes flanqueadas por cactus saguaros, los más grandes del mundo y, encantadoras calas recónditas que se dejan entrever entre cerro y cerro. Desde Cabo San Lucas podrás disfrutar del famoso Arco, unas caprichosas formas rocosas que se erigen sobre el mar ¿y por qué no? De un cocktail Margarita o un Tequila Sunrise junto al mar de esta vibrante ciudad donde muchos “gringos” disfrutan de su retiro, o muchos “springbreakers” aprovechan sus vacaciones universitarias.

Paseando por la localidad de Loreto
Muy cerca, el todavía virgen Cabo Pulmo esperará a los amantes del buceo y de la naturaleza. Subiendo por la Península una parada en La Paz se hace imprescindible para conocer de primera mano una ciudad cultural muy mexicana, con su mercado, catedral y “maleconear” como llaman ellos a pasear por el Malecón. Una cerveza Pacífico y unos tacos de camarón son una buena excusa en cualquiera de los restaurantes que te encuentres en el Malecón.
Ya adentrándonos más por la Península es de considerar, y mucho, conocer pueblitos muy pintorescos por su pasado histórico. El rastro de misioneros jesuitas y franciscanos españoles se palpa al ver curiosas iglesias que todavía intactas conservan un aire colonial único y diferente al resto del país. Te propongo Loreto, San Javier, Mulegé o Santa Gertrudis. Y hay más…

Iglesia de santa Rosalía. Diseñada por Gustavo Eiffel
Otro pueblito muy diferente al resto de la Península de la Baja California y, de todo México, es Santa Rosalía. Una parada allí es obligatoria. Te trasladará por la arquitectura de sus casas y edificios a cualquier pueblo de la Alsacia francesa. Un pueblito muy francés que hasta su iglesia fue diseñada por el mismísimo Gustave Eiffel.
Volviendo a la naturaleza, en la Baja California quizás te encuentres con uno de los mejores santuarios del mundo para ver las ballenas ¿dónde? En la Reserva de la Biosfera El Vizcaíno. Un lugar único para avistar la ballena gris. Si vais a Guerrero Negro es un buen lugar para disfrutar de este santuario de enormes cetáceos.

Viajando cerca de Guerrero Negro
Ya atravesando el ecuador de la Península el paisaje se convierte más desértico pero no por ello menos bello. Después nos espera una parada en Ensenada. Una importante ciudad donde muy cerca se encuentra La Bufadora. Un géiser marino, que no es de origen termal, pero provoca un estampido de hasta 30 metros. Todo espectáculo para los sentidos.
Finalmente terminaríamos nuestro recorrido en Tijuana ¿Quién no ha oído hablar de Tijuana? Esa vibrante y fronteriza ciudad que no pasa desapercibida para nadie. Un paseo por la Avenida de la Revolución, o de la Revu como le llaman los locales, es un estímulo constante en cada metro, esquina y cuadra que la recorras. Y si buscas tranquilidad, las Playas de Rosarito te esperan. Playas con la auténtica esencia californiana.
Puedes saber más de los viajes de Carlos por México visitando su blog.

La valla froteriza que separa Estados Unidos y México a la altura de la Playa Tijuana (México)